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Por Yolanda Urbano
SANTO DOMINGO.- A una semana del trágico derrumbe del techo de la emblemática discoteca Jet Set, en Santo Domingo, el dolor y la consternación aún se sienten profundamente en el país.
Familiares, amigos y personas dolientes siguen visitando la zona cero, dejando flores, mensajes y velas en honor a las 231 víctimas que perdieron la vida en el fatídico suceso.
La tragedia ha sacudido a toda la República Dominicana, no solo por la magnitud de la pérdida, sino también por el impacto social que representa.
Personas de distintas clases sociales frecuentaban el lugar, considerado un ícono de la vida nocturna capitalina.
Asimismo, se destaca la presencia del pintor mexicano Roberto Márquez, quien, a través de su arte, honra la memoria del merenguero Rubby Pérez y de las demás víctimas.
A diario, quienes transitan por la zona no pueden evitar detenerse, aún asombrados por el desplome del techo y la ausencia del que fue uno de los centros de diversión más populares del país.
