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DAJABÓN.- El alcalde del municipio de Dajabón, Santiago Riverón, realizó este miércoles 25 de diciembre un llamado a las autoridades, denunciando que ciudadanos haitianos se han apoderado del cementerio local.
En un video compartido en sus redes sociales, expresó su preocupación y frustración por la falta de respaldo por parte de las instituciones responsables de mantener el orden y la seguridad en la zona fronteriza.
“En este día especial, donde debería reinar la paz y la tranquilidad, me veo obligado a denunciar esta situación. Los haitianos prácticamente han tomado el cementerio. Nosotros, como autoridad municipal, hemos hecho lo que está a nuestro alcance, pero no tenemos apoyo de Migración, el Ejército, el CESFRONT ni la Policía Nacional”, expresó Riverón.
El alcalde destacó que la colaboración de estas instituciones fue más efectiva en el pasado, cuando el coronel Mejía lideraba la Policía en la región. Sin embargo, afirmó que actualmente el municipio se encuentra “abandonado”, lo que dificulta la resolución de este problema.
Riverón hizo un llamado a las autoridades para que brinden el apoyo necesario y se tomen medidas contundentes para recuperar el control del cementerio.
“Los haitianos tienen invadido nuestro cementerio. Esto no puede seguir ocurriendo. Necesitamos que las autoridades responsables asuman su rol en la defensa de nuestra soberanía”, enfatizó.
Además, el alcalde denunció que motocicletas de tres ruedas, utilizadas como transporte en Haití, están operando libremente en Dajabón como si fueran parte del sistema local de transporte. “Estos triciclos están conchando en nuestro municipio como si estuvieran en su país. Si un dominicano intenta hacer lo mismo en Haití, le queman el vehículo o incluso ponen en peligro su vida”, señaló Riverón.
Finalmente, reiteró la necesidad de una respuesta inmediata y coordinada de las autoridades nacionales para abordar estos problemas que, según él, afectan directamente la soberanía y el orden en la provincia fronteriza.
“Hago este llamado de manera responsable, duélale a quien le duela. No podemos seguir permitiendo que estas situaciones se normalicen”, concluyó.
