Estamos en un momento en que los países que han ido vacunando a sus gentes están contemplando la apertura incluso Estados Unidos ha establecido que quienes se hayan puesto las dos dosis de la vacuna ya no tienen que usar mascarillas. Precisamente en este momento se están disparando los indicadores de positividad de la Covid-19 en la población joven.
Son los jóvenes quienes están llenando las salas de cuidados intensivos, están presentando cuadros bastantes peligrosos y muchos de ellos han perdido la vida. Al inicio de la pandemia se tenía cierta garantía de que ser joven era un indicador de que no se presentara un cuadro delicado ante la enfermedad, pero ahora se ha revertido y el coronavirus se ha disparado.
Las últimas muertes y hospitalizaciones no solamente es un hecho aislado en República Dominicana, sino en toda la región de América Latina y a medida en que se acelera el virus aumenta la hospitalización de personas jóvenes, así lo ha documentado en una alerta oficial la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Entre diciembre del 2020 y marzo del 2021 la tasa de mortalidad entre personas menores de 39 años se duplicó en Brasil, se cuadriplicaron para las personas entre 40 y 50 años y se triplicaron para aquellos que están entre 50 y 60 años.
Otro caso es el de Chile donde los indicadores de hospitalización de personas menores de 39 años aumentaron en un 70% en los últimos meses, mientras que en algunas zonas de Estados Unidos las personas hospitalizadas entre 20 y 30 años superan al rango de edad de entre 50 y 70 años.
Esto nos envía un mensaje de que la pandemia no está superada, las vacunas protegen, pero no lo suficiente para evitar el contagio. Personas vacunadas pueden infectar a personas no vacunadas. También se suma las variantes de nuevas cepas que han ido surgiendo en países como Brasil y la India. Este último país ha registrado el récord de más de 400 mil contagios en un día posee más de 15 millones de contagiados y una cantidad de muertes sorprendentes, además de que estas variantes están creando resistencia a las vacunas.
República Dominicana ha anunciado que se prepara para la apertura hacia la presencialidad total en el sistema educativo nacional cuando todavía no se tiene vacunados a todos los profesores, ni estudiantes, a los padres ni familias de los profesores inmunizados cuando estamos apenas a semanas de concluir el año escolar ¿porqué no tomar este tiempo para vacunar a todos los familiares de los estudiantes y de los maestros?
Aunque se ha dicho que la apertura comienza con los niveles de Inicial y Primaria se observó que, al inicio del año escolar, aunque sería a distancia, se les pidió a los maestros que estuvieran en las escuelas y los niveles de positividad se dispararon a tal nivel que se descontinuó esta idea. Posteriormente se produjo el regreso a clases en los municipios en donde la positividad estaba por debajo del 5% y sucedió que el contagio aumentó al punto de tener que clausurar centros educativos.
Ya se sabe que ni jóvenes ni niños pueden ser inmunes al virus como se pensaba al inicio y esta alerta de la OPS es el mejor indicador, pero seguimos en la tozudez de aperturar la docencia. El Ministro de Educación afirmó que se vacunarán a las familias de los estudiantes, en este orden entendemos que la apertura a las clases debe estar condicionada a que se cumpla esta disposición.
Por: Francisco Tavárez, el Demócrata