Santo Domingo.– A casi dos semanas del colapso del techo de la discoteca Jet Set, que dejó un saldo devastador de 232 personas fallecidas, el empresario Antonio Espaillat, propietario del emblemático centro nocturno, ofreció sus primeras declaraciones públicas sobre el siniestro ocurrido la noche del lunes 8 de abril.
En una entrevista concedida a la periodista Edith Febles en el programa El Día, Espaillat reveló que se enteró de la tragedia a través de una llamada de su hermana, quien se encontraba entre los escombros del lugar. “Escucharon una explosión”, le dijo ella, todavía atrapada bajo los restos del techo que colapsó inesperadamente durante una de las noches más concurridas del local.
Espaillat explicó que el techo del Jet Set estaba compuesto por plafones de yeso, lo que habría generado la nube de polvo que se percibió en los videos difundidos tras el colapso. “Por eso el polvillo que caía… durante 30 años eso se caía. Recientemente, se cambiaron los plafones, y el mismo día de la tragedia se cambiaron”, afirmó el empresario, visiblemente afectado.
Con más de tres décadas de operación en el mismo local —anteriormente un cine— Espaillat aseguró que nunca se realizaron modificaciones estructurales al edificio. “No hubo cambios en la estructura cuando se instaló Jet Set”, indicó, desmintiendo versiones que apuntaban a remodelaciones recientes como posible causa del colapso.
“Desde que esto pasó, no tenemos vida… Nunca hubiésemos estado preparados para lo que está ocurriendo”, confesó Espaillat entre sollozos. A pesar de la magnitud de la tragedia, el empresario manifestó su decisión de no abandonar el país: “No voy para ningún sitio. Yo voy a estar aquí”, enfatizó.
La tragedia en Jet Set ha generado una ola de consternación en todo el país, además de abrir interrogantes sobre la seguridad estructural de locales comerciales y de entretenimiento. Las autoridades continúan las investigaciones para determinar las causas exactas del colapso y establecer posibles responsabilidades.