Por Lauren Sepúlveda
SANTO DOMINGO.- Mientras avanza la aprobación de la propuesta de reforma al Código de Trabajo, la que incluye la posible eliminación de la cesantía o liquidación, ciudadanos han expresado su intención de abandonar sus empleos para dedicarse a proyectos propios.
El presidente Luis Abinader señaló que el proyecto de reforma será presentado ante el Congreso Nacional en los próximos días, con el objetivo de modernizar y adaptar la legislación laboral a las realidades actuales del mercado de trabajo.
Sin embargo, uno de los aspectos más polémicos de la propuesta es la eliminación de la cesantía, un beneficio que durante décadas ha sido visto como un derecho fundamental para los trabajadores dominicanos.
La cesantía ha servido como una especie de red de seguridad para los empleados que son despedidos, otorgándoles una compensación que les permite sobrellevar el tiempo sin empleo.
La posible eliminación de este beneficio ha generado un debate entre los diferentes sectores del país. Mientras el Gobierno y algunos empleadores ven en esta reforma una oportunidad para aumentar la competitividad y la flexibilidad del mercado laboral, muchos trabajadores y líderes sindicales consideran que la eliminación de la cesantía es un golpe a los derechos adquiridos y una amenaza a la estabilidad laboral.
En medio de esta incertidumbre, muchos ciudadanos han decidido no esperar el desenlace de la reforma y han optado por el camino del emprendimiento.
La percepción de que trabajar para otros en un entorno donde los derechos laborales podrían verse reducidos ha llevado a muchos a buscar su independencia económica.
«No tiene sentido seguir trabajando para otros si el panorama laboral se vuelve más incierto», es el sentir de quienes han decidido tomar las riendas de su destino y apostar por sus propios proyectos.
La tendencia hacia el emprendimiento no es nueva, pero ha ganado fuerza en los últimos años, especialmente con la aceleración de cambios en el mercado laboral provocados por la pandemia.
El teletrabajo, la digitalización y la flexibilidad laboral han abierto nuevas oportunidades para que los dominicanos exploren caminos que antes parecían inalcanzables.
Ahora, la posibilidad de crear un negocio propio, aprovechar las herramientas digitales y construir una fuente de ingresos independiente se ha convertido en una alternativa atractiva para quienes buscan mayor control sobre su vida laboral.
No obstante, el desafío no es menor. Emprender en un entorno económico aún incierto requiere no solo de habilidades y conocimientos, sino también de una resiliencia significativa. Los nuevos emprendedores deben enfrentarse a un mercado competitivo, donde el éxito depende de la capacidad de innovar, adaptarse y, sobre todo, perseverar.
Mientras el debate sobre la reforma laboral continúa, y con él la incertidumbre sobre el futuro de la cesantía, lo que queda claro es que muchos ya han tomado una decisión: dejar de depender de un empleo para otros y construir su propio camino.