Cansados de promesas incumplidas y de lo que denuncian como una campaña sistemática de abusos, comunitarios del sector Nueva Jerusalén volvieron este miércoles al Palacio Nacional, donde realizaron una protesta cargada de simbolismo y desesperación, uno de los manifestantes se crucificó como forma de denunciar la violencia.
La manifestación que es la tercera en menos de un año, exige el cese inmediato de los desalojos forzosos encabezados por la Fuerza Aérea Dominicana, los cuales han dejado al menos 14 viviendas destruidas y mantienen bajo amenaza a más de 700 familias.
Los comunitarios acusan al Gobierno de dar la espalda a sus propias promesas, recordando que desde 2021 esperan por la titulación de los terrenos, ordenada mediante el decreto 1415.
Denuncian también que la pasada administración militar bloqueó la construcción de un acueducto aprobado por el presidente Luis Abinader, mientras continúan las agresiones, saqueos y destrucción en su comunidad.