Carlo Ponzi era un emigrante italiano que llegó a Estados Unidos alrededor de la década de 1920. De muy bajos recursos como la mayor parte de inmigrantes que llegaban a dicho país. Al poco tiempo «descubrió», que los cupones de respuesta internacional de correos se podían vender en Estados Unidos más caros que en el extranjero. Por lo que el tipo de cambio terminaría por producir ganancias. Así que se esparció el rumor, muchos decidieron no quedarse fuera del negocio y apoyaron a Ponzi con capital.?
Aunque Ponzi estuviera recogiendo grandes sumas de dinero y la gente hiciera fila para confiarle sus ahorros, en realidad Ponzi no estaba comprando los cupones. Estaba pagando beneficios de hasta el 100 % en tres meses utilizando el capital de los sucesivos nuevos inversionistas.
Ponzi convenció a amigos y asociados de que apoyaran su sistema en un principio, ofreciendo un retorno del 50% en una inversión en 45 días. Algunas personas invirtieron y luego obtuvieron lo prometido en el lapso que se había acordado. La noticia se empezó a esparcir, y el promedio de inversiones comenzó a crecer. Ponzi contrató agentes y pagó generosas comisiones por cada dólar que pudieran traer. En febrero de 1920, Ponzi obtuvo unos USD$ 5.000, equivalentes a USD$ 65.000 actuales (2022).
En marzo ya tenía unos USD $30.000. La histeria masiva se estaba construyendo y Ponzi comenzó a expandirse a Nueva Inglaterra y Nueva Jersey. En su tiempo los que invertían obtenían grandes beneficios, y estos inversores pasaban la palabra y motivaban a otros a invertir.
Ya para mayo de 1920 había logrado recaudar unos $ 420.000. Ponzi comenzó a depositar su dinero en el Hanover Trust Bank of Boston (un pequeño banco italo-estadounidense en la calle de Hanover). Logró controlar el banco al comprar sus acciones.
En julio de 1920 ya tenía millones. Muchas personas vendían o hipotecaban sus casas con la esperanza de lograr altos intereses. El 26 de julio gran parte del plan comenzó a hundirse después de que el Boston Post cuestionara las prácticas de la empresa de Ponzi. Finalmente, la empresa fue intervenida por el Estado, que detuvo todas las nuevas captaciones de dinero.
Muchos de los inversores reclamaron enfurecidos su dinero, momento en el cual Ponzi les devolvió su capital a aquellos que lo solicitaron. Esto causó un aumento considerable en el apoyo popular hacia él: muchos le proponían que se adentrara a la política.
El emporio y los sueños de Ponzi crecieron aún más porque hasta planeaba manejar un nuevo tipo de banco. En este banco las ganancias se repartirían por igual entre los accionistas y aquellos que ingresaran dinero en el banco.
En agosto de 1920 los bancos y medios de comunicación declararon a Ponzi en bancarrota. Él mismo confesó más tarde que en 1908 había sido partícipe de una estafa muy similar en Canadá, que ofrecía a los inversores grandes beneficios.
El gobierno federal de los Estados Unidos intervino finalmente a Ponzi y, descubierta su estafa, fue enviado a la cárcel. Pero fue liberado ya que pagó su fianza en dos prisiones distintas y decidió continuar con su sistema, convencido de que lo podía sostener. Muy pronto el sistema cayó y los ahorristas perdieron su dinero.
La mayor parte de las personas no obtuvieron los beneficios, muchos de los cuales invirtieron su dinero en la estafa. Ponzi, aunque fue enviado de vuelta a Italia y a pesar de que se descubrió su estafa, fue aclamado por muchos como un benefactor.
Como vemos no solo en este país hay ilusos para engañar, mantequilla lo ha entendido muy bien. ?
Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.