Pareciera que en nuestro país la función del Ministerio de Interior y Policía es una cartera para llenar un espacio. No se colocan a personas con experiencia en seguridad de estado y en el desarrollo de planes para enfrentar la delincuencia.
Este Ministerio, a pesar de la responsabilidad estratégica que debe jugar, es puesto en manos de politiqueros, no de burócratas. Para muestra haremos un breve recorrido por los últimos ministros que han ocupado ese puesto.
Franklin Almeyda Rancier, nombrado por Leonel Fernández en ese puesto supuestamente diseñó un programa llamado Barrio Seguro. En teoría y en papeles estaba muy bien concebido, pero en la práctica fue un desastre.
La gente en los barrios terminó confiando más en los delincuentes que en la policía pues estos se convirtieron en represores de la ciudadanía. La gente no podía salir con tranquilidad por las noches a pesar de que esa era el objetivo pues eran objeto de atracos.
Lo peor de todo es que si la gente ponía una denuncia de que lo asaltaron los policías se lo decían al delincuente que asaltó al denunciante. Al final Barrio Seguro fue de todo, menos seguro.
Ante el fracaso de este programa a este Ministro se le ocurrió la idea de comprar unas motocicletas Harley Davison a precios sobrevaluados. Las mismas terminaron convertidas en chatarras y abandonadas, al final las vendieron a precio de vaca muerta.
Monchy Fadul, nombrado en el puesto por Danilo Medina. En la gestión de este Ministro la delincuencia y la criminalidad, en sus propias palabras, eran cuestión de percepción de la sociedad.
Para este señor la delincuencia existía en la mente de la gente, pero no en la realidad. Saltó a la palestra pública cuando entendió que era cuestionable una barbería en Villa Vasques con aire acondicionado. Esto cuando se denunció que unos policías habían puesto droga en dicho lugar para inculpar a los dueños y pedirles dinero.
Este Ministro tuvo ojos para ver un aire acondicionado en una barbería de un pueblo pobre, y no para ver las inversiones de César el abusador.
Carlos Amarante Baret. Este fue otro Ministro nombrado por Danilo Medina. Nunca presentó un plan de nada y para colmo confesó en un programa de televisión que se dedicaba a espiar a la ciudadanía. Según él tenían las conversaciones por WhatsApp de personas que eran delincuentes porque organizaban huelgas.
Por último llegamos a la estrella de este momento: Jesús Vasquez (Chú). Desde que fue nombrado por el presidente Luis Abinader no ha pegado una.
En la actualidad se vive una ola de delincuencia y criminalidad ante la mirada absorta de la sociedad. Ante esta situación el Ministro responde con una frase hecha la delincuencia no pasará.
Y le preguntamos al Ministro ¿Hacia dónde no pasará? Por si no lo ha notado hace tiempo que ya la tenemos. En Santiago de los caballeros han ocurrido 11 asesinatos en 15 días de personas que han sido víctima de delincuentes.
Para desgracia del Presidente Abinader, cuenta con pocos gerentes y buenos burócratas. La mayoría son opositores desde dentro. No hay peor enemigo para un gobierno, que un servidor público con responsabilidades estratégicas y no pasa de la lamentación. Y proclamando un éxito que solo él reconoce.
Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.