Sin categoría

El acuerdo que enfrenta a Francia y Australia contra China

Este acuerdo se ha firmado entre Estados Unidos, Reino Unido y Australia, para defender de manera conjunta sus intereses en la zona del Indo-Pacífico. Además de frenar la ambición expansionista de Pekín. La alianza permitirá a Australia dotarse de submarinos de propulsión nuclear, en detrimento de un programa multimillonario, de tecnología francesa. Australia tenía previsto sustituir sus submarinos de clase Collins, de dos décadas de antigüedad, por un tipo más adecuado para un entorno estratégico “cambiante”.

En un comunicado conjunto, Biden, el primer ministro británico, Boris Johnson, y el australiano, Scott Morrison, informaron el acuerdo. Guiados por el compromiso compartido con el orden internacional basado en reglas [una alusión a la impunidad de China], resolvemos profundizar en la cooperación diplomática. De seguridad y defensa en la región del indopacífico. Para enfrentar los desafíos del siglo XXI. Por eso  anunciamos la creación de AUKUS”, acrónimo de Australia, Reino Unido (UK, en sus siglas inglesas) y EE UU.

El anuncio es la punta de lanza de una creciente cooperación en la región, abanderada por Washington. Con el objetivo declarado de frenar el expansionismo chino y su pujanza y estratégica (por ejemplo, en Afganistán).

El próximo 24 de septiembre, Biden recibirá en la Casa Blanca a los primeros ministros del Quad, nombre que recibe el grupo Diálogo Cuadrilateral. Es un grupo que se ha formado  recientemente e incluye a la  India, Japón, Australia y EE UU. No es una casualidad la reciente visita oficial de la vicepresidenta Kamala Harris al sudeste asiático.  Tampoco las giras de responsables del Departamento de Estado y de Defensa.

Ante esto Francia ha reaccionado criticando el acuerdo porque supone romper un importante contrato de venta de submarinos franceses. «Esta decisión unilateral, brutal, imprevisible, se parece mucho a lo que hacía el presidente Trump», denunció Le Drian. Esto no se le hace a un aliado”.

La alianza de defensa en la región indopacífica entre Estados, Reino Unido y Australia no ha caído bien. Este anuncio ha tenido como primer efecto la cancelación de un contrato de compra de submarinos convencionales franceses, estimado en unos 56.000 millones de euros. Ahora serían sustituidos por otros de submarinos nucleares estadounidenses.

El jefe de la diplomacia francesa dijo que «es un golpe en la espalda» de Australia. Ese país «ha traicionado» la «relación de confianza» que se había establecido entre los dos países.

«Eso no se hace entre aliados», subrayó antes de advertir que los australianos tendrán que aclarar cómo pretenden romper los contratos. Los mismos fueron resultado de unas conversaciones iniciadas en 2014 y que en 2019 habían establecido las condiciones y los plazos. La entrega del primer submarino se haría en 2023.

También la Unión Europea no ha reaccionado de forma favorable argumentando de que estos países no les avisaron sobre ese acuerdo. Dicen que deben analizarlo para saber cuáles implicaciones tiene para ellos.

La portavoz principal adjunta de la Comisión, Dana Spinant, señaló que la UE aún está analizando cómo será esta alanza. Pero aseguró que pese al pacto y a no haber sido informados, no afectará a las relaciones con estos tres países.

Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.