La salud mental está en su punto más crítico, y la violencia en nuestra sociedad sigue en aumento, especialmente contra las mujeres. ¿Qué nos está pasando? En lo que va del 2024, más de 24 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas.
Las justificaciones no sirven, y la violencia no disminuye. Cada año, más muertes, más violencia frente a los hijos, más suicidios tras los asesinatos. Y nadie hace nada.
Los programas y políticas públicas no logran frenar esta ola de violencia. Hombres violentos, con problemas mentales y descontrolados, siguen presentes en nuestras empresas y en el ámbito público y privado, y nada cambia. Señor presidente, propongo cerrar el Ministerio de la Mujer.
No podemos seguir financiando instituciones que han fallado históricamente.
¿Cuál es su trabajo? ¿Cuál es el resultado? ¿Cuál es la evaluación de desempeño de la ministra de la Mujer? No es un ataque personal; el Ministerio de la Mujer, al igual que el de la Juventud, solo consume recursos y deja expectativas insatisfechas. Propongo transferir toda su estructura y presupuesto al Ministerio de Salud.
Realicemos un diagnóstico urgente de la salud mental. Convoquemos al empresariado, al liderazgo social y a las iglesias. Evaluemos en casa a mamá y a papá.
Evitemos más muertes. Es tiempo de poner freno a esta violencia que nos ahoga.