Estudiantes de 29 provincias vuelven a las aulas pese a todo el debate que se está generando en el país con el rebrote del Covid-19. Incluso el presidente anunció que esta noche presentarán nuevas restricciones.
En el Siglo XVIII en la educación se manejaba un eslogan que decía la letra con sangre entra y se apoyaba la violencia. Posiblemente, usted que nos lee, haya sido objeto de ello.
Hoy retomamos este eslogan, lo adaptamos y decimos la letra con Covid no entra. Hasta el momento solo están exento las escuelas del gran Santo Domingo y San Cristóbal principales focos del rebrote. Pero sí 3,858 colegios en todo el país a partir de hoy 25 de mayo.
Es una situación bastante delicada, son muchos los que señalan que este es el peor momento para la reapertura. El ministro Fulcar señaló que este regreso a las aulas es gradual y opcional, no es una imposición a los padres.
También ha dicho que los colegios privados están obligados a seguir con las clases virtual y presencial de manera paralela. Pero conociendo el sistema del empresariado es poco probable que usted tenga un profesor en el colegio y otro en el aula.
Si un padre decide no enviar a sus hijos, pero otros sí, tendrá que enviarlo cuando sepan que sus amiguitos están asistiendo. Entonces es un poco cuesta arriba asimilar todo este regreso a la semipresencialidad.
Como el Demócrata entendemos, y gran parte de la sociedad, que nuestros niños y niñas han sufrido un distanciamiento, que acarrea consecuencias emocionales. Entendemos que el proceso educativo es más eficiente en el aula, pero la pandemia está cobrando más vidas a nivel global que nunca.
La OMS ha señalado que en la próxima semana habrán más muertes que todo el año de pandemia que hemos tenido entonces. Y nos preguntamos ¿por qué ceder? ¿por qué un año escolar que está prácticamente ya cerrando?, además las vacunas no resuelven la situación.
¿Por qué exponer a nuestros niños cuando estamos teniendo contagios y tasa de positividad, cada vez más tempranas incluso en adolescentes? La vacuna no da la protección, tampoco se están vacunando a niños porque la formulación molecular en términos químicos no es recomendable.
Esto nos expone a que padres y abuelos sean contagiados por los mismos niños, es una decisión sin pie ni cabeza.
La letra con Covid no entra, esto hay que repensarlo.
Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.