La Miss que no fue reina, pero ganó

La industria de la moda comenzó a experimentar cambios a partir de la década de los 80 y con ello cambiaron los patrones de belleza. Hasta inicios de los ochentas la imagen física no jugaba un rol tan determinante. Incluso en una revista de 1950 se publicó un artículo invitando a las mujeres a engordar para verse bien.

La publicidad, la moda, el mercado y una cultura retrógrada han hecho de las medidas perfectas de una mujer un barómetro peligroso.

Las etiquetas sobre la mujer siempre han bendecido el 90-60-90 como las medidas perfectas para el cuerpo de una mujer.

El 90-60-90 son las proporciones del pecho, cintura y cadera, muchas mujeres siguen estrictas dietas y rutinas de ejercicios. Pero no siempre perciben el daño que les hacen a su cuerpo.

De acuerdo a un estudio de las universidades de Cambridge y Texas, esas medidas no son las perfectas en el cuerpo de una mujer.

El estudio demostró que las «medidas perfectas de una mujer», son la proporción entre la cintura y las caderas.

En este sentido, afirman que un 0.7 es la medida ideal. Pero ¿estamos llegando a un momento en que estas dimensiones dejen de ser tomadas en cuenta?

Este domingo se coronó a la nueva Miss RD Universo, quien representará a la nación en Israel, donde se realizará el Miss Universo. Se trata de Andreína Martínez, la representante de la comunidad dominicana en Nueva York.

En general, su triunfo fue bien acogido por los amantes de este tipo de shows. Sin embargo, en redes sociales hubo otra concursante que se llevó todas las miradas, al punto de volverse tendencia nacional.

Ella es Asley Yinyer de Santo Domingo Oeste, quien con su participación envió un mensaje de inclusión y aceptación.

Su belleza es indiscutible, sin embargo, su cuerpo dista de los estereotipos establecidos por los organizadores de concursos. Son eventos donde se juzga el físico de la mujer.

Se motivó a participar en el concurso para vivir la experiencia. También para cumplir el sueño de muchas mujeres que también sueñan con ser ejemplo en su país. Aunque no ganó envió un mensaje potente y puso el tema en el debate.

Para ella ser una reina no es un pasatiempo, es una responsabilidad que lleva tiempo y dedicación al igual que otras carreras.

La participación de esta chica nos deja claro que, ya en el Miss RD Universo no se anda buscando perfección.

Para seguir rompiendo estereotipos el color azul es su preferido a la hora de escoger un atuendo porque representa la inmensidad del universo. El azul ha sido siempre relacionado con el hombre, en el caso de la mujer es el rosado.

Ojalá su mensaje llegue.

Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.

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