Por todos es conocida la historia bíblica de David y Goliat en donde el primero logra vencer al segundo al dispararle con una onda. Es interesante asumir el símil porque David se enfrenta a un rival que en proporciones físicas es superior a él.
En el día de ayer se hizo viral un video que circuló por todas las redes sociales realizado por el cineasta Carasaf Sánchez. Ahí se observaba a una joven conversar con un supuesto jefe que la acosaba a pesar de que ella era casada.
En el mismo se menciona el nombre de Rubén quien hacía el papel del jefe y muchos medios de comunicación le pusieron imagen al nombre. O sea, como la llamada es por teléfono no se sabe quién es Rubén. Pero muchos medios entendieron que se trataba de José Rubén Gonell director de la Oficina Nacional de Derecho de Autor (ONDA).
De alguna manera esto nos deja dos lecciones: una para los medios de comunicación y otra sobre la realidad que denuncia el video.
En República Dominicana existe una cultura en donde las niñas de 12 y 13 años comienzan a ser acosadas, perseguidas y abusadas. Tanto psicológica y emocionalmente, no por sus compañeros de clases, sino por los mismos profesores en las escuelas o por adultos vecinos.
Y sobre esto se ha hablado muy poco. Al Ministerio de Educación suelen llegar muchas denuncias de acoso de profesores a estudiantes que hasta ofrecen calificación a cambio de favores sexuales. Y esto no solo se queda en el ámbito de los liceos públicos, en los colegios y las universidades.
Siempre digo que debemos romper con la bendita cultura de proteger lo mal hecho, de decir que se comete un hecho, pero no decir quien lo hace. Hemos creado una cultura del apañamiento y la complicidad en la sociedad dominicana.
Este caso denuncia un tipo de abuso que se da de un funcionario a una empleada, pero esto es algo que empieza desde la escuela. De manera que hemos ido aprendiendo a ver como normal algo que es una tragedia social como el acoso y la violación.
Hasta el momento hemos visto varios escándalos de acoso y abuso en el actual gobierno y no significa que no ocurrieran en los anteriores gobiernos.
La otra lectura que debe dejarnos es a los medios de comunicación de primero investigar y profundizar antes de hacer acusaciones muchas veces sin fundamentos.
La onda de Carasaf no era la de David, pero su video retrata una realidad parecida. Nos referimos al acoso que viven muchas mujeres por hombres que están en una posición de superioridad.
Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.
