Es importante aclarar que esto no es una acción de donación de Canadá ni tampoco que llegaron militares de ese país. El gobierno de Ariel Henry compró unos 18 camiones blindados por un valor de 10 millones de dólares.
Estos equipos debían llegar hace semanas, pero presentó problemas con la permisología. Han llegado varios técnicos de Canadá, no militares, para entrenar a miembros de la Policía Nacional Haitiana.
Hay un cierto descontento porque no han llegado todos, pero se estima que a más tardar el miércoles 19 de noviembre deben llegar los demás. Aunque Canadá debió donar esos camiones porque Haití, en medio de la crisis en que se encuentra, invertir ese dinero es mucho.
No vamos a juzgar a Canadá, cada país es soberano y toma las decisiones que entienda, pero en el peor momento de Haití no llega la ayuda.
Estados Unidos ni Canadá quieren enviar sus tropas a Haití, y no han podido ponerse de acuerdo en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Cada país está jugando un rol conservador por lo que representaría actuar en Haití y que les surja algún escándalo. Por ejemplo, Joe Biden anda detrás de una reelección, si envía tropas a Haití y suceden escándalos como ya ha pasado eso le afectaría.
Es sabido lo sucedido con la presencia de la Minustah, quienes no solo llevaron el cólera, sino que han sido acusados de violaciones de niñas.
Es por ello que esa ayuda solicitada por el Pirmer Ministro de Haití en esta ocasión no ha sido escuchada. Sin embargo, Estados Unidos envió al subsecretario de Estado Brian Nichols quien comenzó suspendiendo el visado a 11 personalidades haitianas.
Una decisión tomada luego de que el Departamento de Estado dijera que tomaría medidas contra quienes apoyan a las pandillas haitianas. Aunque no se dieron a conocer las personas que les cancelaron el visado, Estados Unidos ha dejado claro que quiere ayudar.
También Estados Unidos ha enviado un barco a la costa de Haití para evitar que los cabecillas de las pandillas se escapen. La intención no es una fase reactiva ni de ataque a las pandillas, pero esto es clave.
De inmediato Barbecue, quien dirige un grupo llamado el G9 que agrupa a una serie de bandas, ha pedido una amnistía. Quiere que se le permita salir de Haití y salvaguardar a las bandas que él representa.
Lo otro que está haciendo Estados Unidos es congelando los activos para que no hagan ningún tipo de transacciones.
Los jefes de banda manejan todo el tema geopolítico y lo más probable es que traten de buscar asilo en los países enemigos de EE.UU.
Mientras tanto seguiremos dando seguimiento al tema haitiano desde nuestras plataformas el Demócrata y Más Allá de la Curva. A partir del lunes tendremos el inicio de una serie de documentales realizados desde la frontera norte del país, en Dajabón.
Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.