El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, ha sido apresado y será extraditado a Estados Unidos apenas dejando el cargo, pero ¿por qué?
La Justicia estadounidense vincula a Hernández, quien gobernó el país entre 2014 y 2022, con delitos del narcotráfico.
Los señalamientos y sospechas sobre el exmandatario llevan varios años flotando en el ambiente.
En 2018, el hermano de Hernández, Juan Antonio, quien era diputado nacional, fue capturado en Miami acusado también de crímenes relacionados con el narcotráfico.
En marzo de 2021 fue hallado culpable del tráfico de 150 toneladas de cocaína desde Honduras hacia EE.UU. y condenado a cadena perpetua.
Fue a partir de este vínculo familiar directo que las sospechas alcanzaron al expresidente. Sin embargo, Hernández ha rechazado estos señalamientos en el pasado y ha asegurado que en su gobierno se dedicó a combatir el negocio de drogas.
El propio Hernández señaló a través de un mensaje en su cuenta de Twitter que quedaba a disposición de las autoridades.
«Mis representantes han recibido el mensaje para que sea llevado a las autoridades de que estoy presto y listo para colaborar. Y llegar voluntariamente en el momento en que el juez natural que designe la honorable Corte Suprema de Justicia así lo decida. Para poder enfrentar esta situación y defenderme», dijo este martes por la mañana.
En la nota enviada por la embajada de EE.UU. en Tegucigalpa al gobierno hondureño, específica por qué se hace la petición de extradición. «Juan Orlando Hernández es buscado para ser juzgado en Estados Unidos por tráfico de drogas y delitos con armas de fuego».
Existen señalamientos de algunos narcotraficantes ante distintos tribunales estadounidenses, donde confiesan pagos ilícitos al círculo más cercano de Hernández para traficar droga por territorio hondureño.
A esto se sumó el juicio contra su hermano Juan Antonio, que era diputado nacional cuando fue capturado, en marzo pasado.
Durante ese juicio se puso en evidencia cómo los grupos de narcotráfico infiltraron casi todas las esferas del poder en Honduras. Desde el ámbito judicial pasando por la fuerza pública hasta llegar al poder ejecutivo.
Otro de los casos que salpicó a Hernández, y que finalmente disparó el proceso contra el exmandatario, fue el de Geovanny Fuentes Ramírez. También juzgado por un tribunal de Nueva York y hallado culpable a principios de febrero de este año.
Fuentes fue condenado a cadena perpetua por el tráfico de cinco toneladas de cocaína. Y a otros 30 años de cárcel por el porte ilegal de armas, al considerar que protegía su mercancía con el uso de ametralladoras.
Durante el procedimiento judicial en contra de Fuentes Ramírez se indicó, a través de varios testimonios, que uno de sus socios sería Juan Orlando Hernández.
Ahora, según los medios locales, los cargos formales que se le presentarán son:
- 1-Conspirar para traficar una sustancia controlada a EE.UU. desde un lugar fuera del mismo. Fabricar y distribuir una sustancia controlada con la intención y el conocimiento de que sería importada ilegalmente al país del norte. De igual manera, fabricar, distribuir y poseer con la intención y distribuir una sustancia controlada a bordo de una aeronave registrada en Estados Unidos.
- 2-Usar o portar armas de fuego o ayudar e instigar al uso, el porte y la posesión de armas de fuego. En apoyo de la conspiración de importación de narcóticos de la que se le acusa en el cargo uno.
- 3-Conspiración para usar o portar armas de fuego en apoyo de la conspiración de importación de narcóticos.
Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.