SANTO DOMINGO.- El informe realizado por la Oficina de la Defensa Pública revela que las condiciones de detención y prisión en 2023 presentan una situación alarmante de hacinamiento y sobrepoblación.
En las 41 cárceles del país, más de 400 privados de libertad padecen de enfermedades terminales y requieren atención inmediata, como hipertensión y diabetes, además de enfermedades crónicas y patologías mentales, junto con la falta de acceso a medicamentos.
La reforma carcelaria hasta ahora no ha podido ser una realidad para mitigar la situación. Roberto Santana, asesor de la reforma penitenciaria, detalla que esto se debe a la falta de voluntad por parte de los actores interesados.
El Centro de Corrección de La Victoria continúa siendo el protagonista de los correccionales. Aunque está diseñado para 2,000 personas, actualmente alberga a más de 7,000 internos.
También se llama la atención de la jueza de la Suprema Corte de Justicia, María Garabito, ante la cantidad de personas en cárceles preventivas sin haber sido condenadas, lo que llenó de preocupación a Rodolfo Valentín al realizar el informe.
Son muchos los reos que viven en hacinamiento extremo, sin camas ni colchones adecuados, lo que refleja una profunda crisis en la infraestructura y llama a reformular el sistema.