REDACCIÓN INTERNACIONAL.-Tres tripulantes de un avión ruso Sujoi Superjet SSJ-100, que volaba sin pasajeros, murieron este viernes al estrellarse el aparato en un bosque de la región de Moscú, al sur de la capital rusa.
«Un Sujoi Superjet se accidentó en la región de Moscú. El aparato cayó en una zona boscosa. A bordo viajaban sus tres tripulantes. Según datos preliminares, todos murieron», informó el Ministerio de Emergencias ruso en Telegram.
La nota agrega que el accidente no causó víctimas entre la población civil.
Las primeras informaciones indican que el aparato se precipitó a la tierra cerca de la aldea Apráskino, cuyos habitantes pudieron ver la caída y la explosión del avión.
Mientras, fuentes de emergencias indicaron que el SSJ-100 accidentado realizaba un vuelo entre la fábrica donde estaba en una reparación rutinaria hacia el aeropuerto moscovita de Vnúkovo.
Antes de la caída, el avión estuvo en el aire durante cerca de una hora, y parte de ese tiempo el capitán del vuelo lo utilizó en alejar el aparato de zonas residenciales, según medios rusos.
El último siniestro mortal en el que estuvo implicado un avión Superjet-100 tuvo lugar hace un lustro en la terminal aérea moscovita de Sheremétievo y dejó 40 víctimas entre los pasajeros del aparato, que volvió al aeropuerto de despegue tras la detección de un fallo y se incendió durante el aterrizaje de emergencia.
SSJ-100 es el primer avión civil diseñado en Rusia tras la caída de la URSS. El avión siniestrado este viernes se fabricó en 2014.
Las autoridades rusas incoaron una causa penal para esclarecer todas las causas de la tragedia.