En un evento reciente organizado por Financial Times en Nueva York, el presidente Luis Abinader destacó los avances estratégicos que están posicionando a la República Dominicana como un hub logístico de clase mundial. Estos esfuerzos, respaldados por un enfoque en la infraestructura física y humana, buscan convertir al país en un epicentro de conectividad y comercio global.
El director general de Aduanas, Eduardo Sanz Lovatón, conocido como Yayo, subrayó la importancia de estos avances en sus redes sociales. En su intervención, Yayo enfatizó que el país cuenta con «10 puertos marítimos, 8 aeropuertos conectados a 170 destinos globales y acuerdos de cielos abiertos», lo que convierte a la logística en «el próximo gran motor de crecimiento comercial» de la nación.
Las palabras de Yayo reflejan un esfuerzo conjunto entre el sector público y privado para potenciar el comercio y las inversiones extranjeras. La infraestructura robusta y las alianzas público-privadas están impulsando a la República Dominicana hacia la cima en términos de competitividad global en el sector logístico.
Por su parte, el presidente Abinader añadió que el país está redesarrollando la infraestructura necesaria para ser reconocido mundialmente como un centro de conectividad logística de importación. «Hemos crecido como puerto marítimo de la capital nacional en camino de alcanzar los 2,5 millones de usuarios al año», indicó el mandatario, destacando además la expansión y modernización de las oficinas de turismo.
Este compromiso con el desarrollo logístico es un pilar fundamental en la estrategia del gobierno de Abinader para transformar la economía dominicana, diversificar sus fuentes de ingresos y afianzar su rol en el comercio internacional.
Estos avances no solo fortalecerán el comercio nacional, sino que también posicionan a la República Dominicana como un actor clave en las cadenas de suministro globales, abriendo nuevas oportunidades de crecimiento económico y desarrollo sostenible.
Logística: El Nuevo Motor de la Economía Dominicana
Con esta visión a largo plazo, la República Dominicana está sentando las bases para un futuro próspero, aprovechando su ubicación estratégica en el Caribe y su infraestructura en expansión. Las políticas de cielos abiertos y los acuerdos comerciales con diversas regiones del mundo están diseñados para facilitar el flujo de bienes y servicios, lo que genera mayor competitividad y atractivos incentivos para la inversión extranjera.
En conclusión, la República Dominicana, bajo la administración de Luis Abinader y con el apoyo de líderes clave como Eduardo Sanz Lovatón, está en camino de convertirse en un hub logístico de clase mundial, donde la conectividad y la infraestructura moderna jugarán un papel central en su crecimiento económico y su proyección internacional.
