Ortega: el nuevo Somoza de Nicaragua

Ortega: el nuevo Somoza de Nicaragua

La policía de Nicaragua arrestó a otros cuatro dirigentes opositores de Daniel Ortega, incluidos los exguerrilleros sandinistas disidentes Dora María Téllez y Hugo Torres.

Torres es un ex general del ejército que abandonó el partido de Ortega por disentir de su liderazgo y es vicepresidente del movimiento opositor Unamos.

Otras detenidas son Ana Margarita Vijil, Tamara Dávila y Suyen Barahona, todas dirigentes del disidente Unamos. Barahona es presidenta de la misma agrupación opositora.

Cuando el poder crea adicción nubla las ideas porque Torres sacó a Daniel Ortega de la cárcel preso desde 1967 por haber asaltado un banco. Hoy Ortega lo apresa porque decidió un camino diferente para su país y se apartó de su liderazgo.

Hasta ahora ya son 12 los opositores que han sido detenidos desde el 2 de junio. Se los investiga en la mayoría de los casos “por realizar actos que menoscaban la independencia, soberanía y la autodeterminación”, y “pedir sanciones” extranjeras.

Entre los detenidos en los últimos días figuran cuatro aspirantes presidenciales a los comicios del 7 de noviembre.

Daniel Ortega no quiere que lo señalen como un dictador, sin embargo sus acciones no permiten otro calificativo. En primer lugar está apresando no posibles candidatos, sino personas que ya han sido elegidos como tales para disputarle el poder el 07 de noviembre.

Dentro de los detenidos, hay excompañeros suyos que combatieron contra la dictadura de Somoza y que se alejaron de él porque observan los mismos rasgos. Los cargos por los que se les encarcelan son absurdos, no tienen asidero jurídico. Si no se tratara de un régimen donde todo está controlado, incluyendo la justicia, esas personas no estarían apresadas.

Estas acciones contra los dirigentes de Unamos son parte de la escalada represiva del orteguismo contra toda la oposición democrática.

Lo que sucede en Nicaragua raya en la ridiculez pues la esposa de Ortega es la vicepresidenta y el jefe de la policía es su consuegro.

Ortega quiere eliminar a sus adversarios del proceso electoral porque teme perder los comicios. El presidente, de 75 años, lleva casi 15 años en el poder y apuesta a su tercera reelección para un cuarto mandato consecutivo.

Ortega comete un error grave porque las personas a quienes ha apresado saben lo que significa estar en la cárcel porque ya han estado. No tienen miedo porque lo derribaron cuando destituyeron a Somoza, ese día en Nicaragua se perdió el miedo. Además saben de lucha porque su vida ha sido una lucha constante.

Cegado por la ambición no analiza que mientras más abusos y excesos comete, la indignación del pueblo crece y pudiera convertir en víctimas sus victimarios.

Por: Francisco Tavárez, el Demócrata.

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